Gran victoria ante el Apa Sancti Petri

"Que partidazo, de los mejores que he dirigido en mi vida" (el árbitro al final del encuentro felicitando a los dos delegados de los equipos por el nivel de los jugadores de ambos conjuntos).

Muy buen partido el que hemos podido ver este sábado por la mañana en el Fernando Quiñones. Dos equipos chiclaneros se enfrentaban en un derbi local donde los de La Salle tenían más que perder ya que hubiesen perdido toda posibilidad de escalada en la clasificación.

Aunque se presentó el viento de levante lo hizo en fuerza menor a la esperada por lo que no fue un condicionante serio. Sí es cierto que propició ocasiones donde los porterios tuvieron alguna dificultad para atajarlo con seguridad y al menos un gol por bando se lograron gracias a su ayuda. Incluso en una de las últimas acciones del partido un lanzamiento que se colaba por la escuadra de la portería del Sancti Petri se marchó fuera al soplar una fuerte racha en ese momento.

En el partido de ida La Salle fue claramente superada por su adversarios, nunca fuímos dueños de la pelota y apenas creamos peligro en la portería rival. Esta vez la historia no se repetió. La superioridad fue nuestra y ellos fueron los que continuamente corrían detrás de la pelota sin conseguir su control.

El primer gol se consiguió en lanzamiento directo de falta al borde del área tras derribar el último defensa a nuestro banda izquierda tras este haberse desecho de otros dos contrarios con hábiles regates. El lanzamiento tras superar la barrera por su flanco entró por el centro de la portería donde la estirada del portero no llegó quizás por no haberse colocado demasiado bien. El segundo no tardó mucho en caer ya que el balón rondaba siempre el área de los visitantes.

Seguimos atacando pero los del Trovador se sacaron de la manga dos acciones de contraataque que, al igual que en el partido de ida, nos cogieron la espalda y lograron empatar el partido. ¡Otra vez se repetía la historia en casa! Dos oportunidades visitantes y dos goles encajados. La inoportuna y momentánea lesión de nuestro centrocampista nos restó fuerza en el medio campo y aunque seguimos llegando el portero rival hizo intervenciones de mérito que evitaron más goles.

Volvimos a adueñarnos del balón, del espacio y de las ganas del triunfo y pudimos volver a adelantarnos poco antes del fin de la primera parte. No estaba nada hecho pero el ambiente era más de ir a más que de perder. Claro que habíamos jugado hasta ahora a favor de viento. Se escucharon algunos comentarios sobre la posible equivocación de haber elegido campo de forma errónea pero la apuesta salió bien (ya era hora que salieran las cosas).

La segunda parte fue un calco de la primera sólo que esta vez nuestras llegadas eran goles. Los jugadores del Apa se mostraban más cansados que los nuestros (teníamos 12 convocados y ellos sólo 10) y todos los balones divididos acababan en nuestro poder.

Los goles llegaron continuos hasta llegar a siete por lo que se pudo repartir mucho más si cabe los minutos de juego entre los niños. Incluso la lesión a falta de quince minutos para el final de nuestro medular no llevó la incertidumbre que, con otro resultado, hubiese aparecido sin duda ninguna. El equipo brilló cuando debía y se puso el mono de trabajo cuando ya con los deberes realizados no corría peligro el marcador. Mención especial a nuestro delantero que en el día de su cumpleaños consiguió marcar 6 goles en el partido, felicidades por partida doble.

Arreón final del Sancti Petri que sirvió para maquillar el resultado dejándolo en un 7 a 5 final que bien pudo ser más abultado.

Tras la inexplicable racha de 7 partidos sin ganar al final de la primera vuelta y comienzo de la segunda el grupo vuelve a responder y vuelve a jugar como un equipo, solidario en el esfuerzo y generoso en su juego.

Destacable la figura del árbitro tanto en su trato a los jugadores como a los técnicos mostrándose dialogante y didáctico. A algunos de los jugadores de los dos equipos habría que darles un curso de cómo sacar de banda.